Lo peor que le puede pasar al responsable de una fábrica o negocio, es que los equipos electrógenos no funcionen en el momento que se precisa de estos. Por esta razón se recomienda un mantenimiento programado que evitará este tipo de situaciones tan indeseadas. Esto se logra con revisiones técnicas periódicas del motor, del alternador, la batería, con los cambios oportunos de aceite, de los filtros, o un excelente mantenimiento de limpieza, en otros muchos aspectos a tener en cuenta.